A todos y a todas nos gusta la ropa interior, no cabe duda que es necesaria y si es de calidad nos hace sentirnos mejor, con mayor seguridad aunque no sea un complemento que se vea. O eso pensamos. La ropa interior se adivina más de lo que en muchas ocasiones tenemos en cuenta y no lo hace para bien si no todo lo contrario.
El no elegir la ropa interior adecuada provoca que un estilismo cuidado con esmero se eche a perder. La ropa interior es la que da forma al cuerpo, si provoca en él bultos o deformidades cualquier prenda de vestir quedará mal, dando una imagen de dejadez.
El sujetador es una prenda que en ocasiones no se suele revisar como es debido. Las tiras suelen darse de sí provocando que el pecho quede caído, lo que da a la mujer una imagen no deseada. Se debe siempre tener los pechos a la altura adecuada para que la figura sea más esbelta pero sin sobrepasar los límites, de lo contrario el efecto es de falsedad. Un sujetador con encajes u otros adornos no debe utilizarse debajo de ropa ajustada que marque los relieves de la ropa interior.
Las bragas también son un complemento muy importante y deben ajustarse a la medida del cuerpo, por salud para que no afecte a la circulación y por estética. Unas bragas inadecuadas con un pantalón ajustado pueden arruinar un cuerpo bonito o dejar en evidencia alguna talla de más que no se desea tener.
Los hombres también deben darle a su ropa interior la importancia que se merece y elegir el modelo que mejor les quede según su cuerpo y su forma de vestir, no todos los modelos de calzoncillos y colores se pueden utilizar con todos los tipos de ropa.
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