La celulitis afecta tanto a hombres como a mujeres, si bien es en el cuerpo de las mujeres donde se forma con más facilidad. Combatir la celulitis no es únicamente una cuestión de estética, también lo es de salud.

La celulitis es una enfermedad del tejido subcutáneo. Hay varios tipos de celulitis que afectan a quien la sufre de formas diferentes, algunas son leves y otras presentan grandes molestias. La formación de la celulitis se da por una mala circulación y la activación hormonal, una vida sedentaria y la genética influyen en su formación en gran medida. Al hacer ejercicio se activa el metabolismo de las células grasas y la circulación de la sangre.

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La celulitis puede aparecer en personas obesas y delgadas, si bien las primeras tienen más tendencia a padecerla. La aparación de la celulitis también es un problema en la intimidad de cada persona pues se hace evidente con la ropa interior y la ropa de baño. Pero la celulitis se puede prevenir e incluso puede desaparecer. Para combatir la celulitis y poder lucir la ropa íntima que más gusta, así como disfrutar de unas piernas sanas durante todo el año es necesario seguir unos hábitos.

Qué hacer para combatir la celulitis

  • Una alimentación sana y baja en sal, cinco veces al día.
  • Consumir poco alcohol, hidratos de carbono, fritos y dulces.
  • Hacer ejercicio. Caminar, nadar o bailar también son ejercicios y los pueden hacer casi todas las personas.
  • Las cremas antilelulíticas hacen efecto si se utilizan durante todo el año y todos los días, se ha de aplicar desde debajo del pecho hasta el tobillo, ello hará que se active la circulación.
  • Vinagre de manzana. El vinagre de manzana reduce la apariencia de la celulitis. Se puede mezclar con agua, endulzarlo con miel y tomarlo todas las mañanas. Otra alternativa es mezclar el vinagre de sidra de manzana con un aceite de masaje o crema y masajear con la mezcla las zonas afectadas dos veces al día. La constancia es muy importante por lo que esta acción deberá realizarse todos los días.
  • Tomar drenantes naturales. Algunos de ellos son el aloe vera, el té verde, la piña, cola de cereza, infusiones de hinojo o cola de caballo.