En verano la depilación es más frecuente, con las consecuencias que ello provoca en la piel. Hay mujeres y hombres que se depilan varias veces a la semana, bien por estética o bien por higiene, la cuestión es que deben hacerlo y ello puede resultar molesto. 
La depilación láser es una solución que dura todo el año lo que la hace menos agresiva para la piel, ahorra tiempo y aporta comodidad. En verano se luce la ropa de baño y la ropa íntima y en invierno la ropa interior gana protagonismo. Sin tratar aquí la conveniencia o no de dejar que el vello crezca vamos a hablar de la depilación láser.
Qué debes saber sobre la depilación láser
Cremas anestésicas. Antes de proceder a la depilación con láser se prepara la zona con una crema anestésica. Es importante conocer el historial médico de la persona pues los productos que contienen las cremas pueden no ser los adecuados para ella.
Riesgos. Pueden provocarse quemaduras de segundo grado y salir manchas en la piel por lo que la depilación láser siempre debe ser realizada por un profesional.
Zonas delicadas. La depilación láser puede ser llevada a cabo en cualquier zona del cuerpo, aunque algunas son menos aconsejables pues al eliminar el vello este tiende a salir con mayor cantidad en la zona contigua. La zona facial es la más delicada por lo que se recomienda realizar la depilación únicamente en el caso de que el vello sea claramente negro y visible. En la zona genital se pueden producir daños ya que no tiene protección.
Mejores zonas. Muslos, piernas, axilas, ingles y antebrazos.
Duración. La depilación es definitiva pero en algunas zonas del cuerpo el crecimiento del vello depende de las hormonas por lo que puede volver a salir. Estas son: la línea alba y la zona lumbar de las mujeres, canalillo y areolas, tórax y espalda de los hombres.
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